El viernes 16 de Abril fui a Hacienda el Ciervo 10, edificio conocido como Porto Vita 2 en Hacienda de las Palmas para tratar de entrar al departamento de la familia Gebara Farah pero resultó que la Procuraduría General del Estado de México tiene muy resguardado el departamento y al minuto que entré al departamento me corrieron del lugar (sólo me dio tiempo de tomar una fotografía), pero ya que había hecho el viaje a esa zona, decidí entrevistar a algunos vecinos (de los cuales omitiré sus nombres tal como ellos me lo solicitaron).
Una mujer de 32 años, madre de 3 hijos que vive en el edificio de junto conocido como Palma Real I, comentó que a partir del día 22 de marzo se comenzó a ver la zona llena de judiciales custodiando el edificio de junto, y nadie sabia exactamente lo que sucedía, únicamente se oía el rumor que una niña de 4 anos, la cual tenia una discapacidad física, había desaparecido de su casa. Se oía que la madre la había acostado en la noche y que en la mañana siguiente cuando la quisieron despertar para ir a la escuela ya no estaba. Este hecho le parecía muy extraño ya que el edificio estaba custodiado por Aviv, una empresa de seguridad privada (misma que cuida el edificio don de ella habita). Comenta que después de unos días la noticia se dio a conocer en todos los medios de comunicación y fue de esta manera que se entero del caso Paulette y que desde ese día hasta el día de hoy ve policías a todas horas.
Otra persona que me encontré en el parque de enfrente al edificio paseando a su perro, me contó que ella conocía a Lizzete ya que sus hijas (Lizzete y Daniela) habían sido compañeras en un kinder de la zona hace 5 anos y que actualmente eran amigas en Facebook y es así como mantenían comunicación. Cuenta que a partir de la desaparición de Paulette, Lizzete transmitía muchos mensajes de desesperación solicitando que les ayudaran a encontrar a su hija y pedía a todos sus amigos que colocaran letreros con la foto de su Paulette, lo cual ella hizo en varios lugares de la zona, como el edificio donde habita, un supermercado y una tienda de regalos. Cuenta que ya no ha tenido más comunicación con ella y que a pesar de las declaraciones y todo lo que se ha transmitido en los medios, aun cree en su inocencia. Desde que la noticia comenzó a circular en los medios la ha seguido por televisión e internet. También me hizo saber que el caso la conmovió mucho y que lamenta todo lo sucedido.
Pude entrevistar a una señora que vive en el mismo edificio donde habita la familia Gebara Farah y me comentó que ella no tenía ninguna relación con esta familia, que ocasionalmente se encontraban en el elevador y el saludo era cordial, que nunca tuvo la oportunidad de convivir con ellos por lo que no sabe cómo era su relación familiar. Me contó que el mismo día que se dio aviso a la policía, entraron judiciales a revisar cada departamento del edificio en búsqueda de la niña y que a partir de ese día, fuera del edificio hay policías custodiando y algunas días también hay reporteros. Comenta que está muy decepcionada por el sistema de seguridad del edificio, ya que las cámaras de circuito cerrado no grababan la información y que desea que pronto se solucione el problema para regresar a la normalidad sin estar rodeados de tanta vigilancia. El caso la impresionó mucho y comentó que nunca pensó que algo así podía suceder tan cerca de ella.
El personal que labora en el edificio, tanto administrativo, como de limpieza y de seguridad, no permitió ningún tipo de entrevista.
Hasta la próxima. Los mantendré informados del tema.
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